Las joyas elaboradas con acero quirúrgico 316L tienen muchas ventajas que las hacen destacar frente a otros materiales como la plata o el oro. Algunas de estas ventajas son:
- No se degradan ni se oxidan con el paso del tiempo ni con el contacto con el agua, el sudor o los productos químicos. Esto hace que mantengan su brillo y su color original sin necesidad de limpiezas especiales ni mantenimiento.
- No manchan la piel ni provocan alergias o irritaciones. Al tener un bajo contenido en níquel, son ideales para personas con piel sensible o que sufren reacciones alérgicas a otros metales. Además, al ser un material de grado médico, se puede usar incluso en heridas o piercings sin riesgo de infección.
- Son brillantes y atractivas. El acero quirúrgico 316L tiene un aspecto similar al de la plata, pero con un tono más cálido y luminoso. Además, se puede combinar con otros materiales como el caucho, la piel, las piedras preciosas o semipreciosas, el cristal o el esmalte para crear diseños originales y variados.
- Son resistentes y duraderas. El acero quirúrgico 316L es un material muy duro y resistente que soporta bien los golpes, los arañazos y las deformaciones. Por eso, es perfecto para joyas que se usan a diario o que están expuestas a condiciones extremas como el calor o la humedad.


