El tungsteno es un metal fascinante que ha ganado mucha popularidad en la joyería moderna gracias a sus increíbles propiedades. A continuación, te cuento todo lo que necesitas saber sobre él:

¿Qué es el Tungsteno?
El tungsteno es un metal de transición con una densidad y dureza impresionantes. Es conocido por ser uno de los metales más resistentes que existen. Su nombre proviene del sueco tung sten, que significa “piedra pesada”.
En joyería, se utiliza en forma de carburo de tungsteno, una aleación que combina tungsteno con carbono para darle su característica resistencia y durabilidad.
Beneficios del tungsteno en joyería
Durabilidad excepcional: El tungsteno es extremadamente resistente a los arañazos y las abolladuras, lo que lo hace perfecto para piezas que usamos todos los días, como anillos y pulseras.
Brillo duradero: A diferencia de otros metales, mantiene su brillo por mucho tiempo sin necesidad de pulidos frecuentes.
Hipoalergénico: Es una opción excelente para personas con piel sensible o alergias al níquel.
Estética moderna: Su acabado brillante o mate, combinado con colores como el negro, plateado o incluso dorado, lo hace atractivo para diseños elegantes y contemporáneos.
Costo accesible: A pesar de su alta calidad, el tungsteno suele ser más asequible que otros metales como el oro o el platino.
Cuidados recomendados
Aunque el tungsteno es increíblemente resistente, tiene algunas particularidades que debes tener en cuenta:
Evita los golpes extremos: Aunque es difícil de rayar, el tungsteno puede fracturarse si sufre un impacto muy fuerte debido a su rigidez.
Limpieza sencilla: Límpialo con agua tibia, jabón suave y un paño suave. Esto bastará para mantenerlo impecable.
Evita productos químicos agresivos: Sustancias como cloro o limpiadores abrasivos podrían afectar el acabado de tu pieza.
Guárdalo adecuadamente: Si no lo estás usando, colócalo en una bolsita suave o un compartimento separado para evitar que se dañe por contacto con otros objetos.


